* Este modelo beneficia a las universidades para cumplir su función, beneficia a la SSA y a los hospitales del Sector Salud, pero sobre todo a la población a través de la cultura de estilos de vida saludables, dijo el Rector de la UdeC, en el Consejo Nacional de Salud
ISLA NAVIDAD, COL. 1o Diciembre 2010 (PN).-“Las universidades existen para educar, crear conocimiento a través de la investigación, para contribuir a la comunidad y a la sociedad civil y, como corporaciones y comunidades, ejercen un impacto sobre la salud y el bienestar de los individuos”.
Esto dijo el rector de la Universidad de Colima, Miguel Ángel Aguayo López ayer por la tarde, al presentar la conferencia “Universidad Saludable PREVENIMSS, un nuevo paradigma de atención en salud para los universitarios”, en el marco de la XVI Reunión Ordinaria del Consejo Nacional de Salud, que se realiza del 8 al 10 de diciembre en Manzanillo, Colima.
En el encuentro informó, ante los funcionarios y directivos de instancias de salud de todo el país, encabezados por el Secretario de Salud, José Ángel Córdoba Villalobos, que este modelo fue desarrollado entre cinco o seis instituciones de educación superior mexicanas en 2005, encabezadas por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez y la U de C. “De allí se fueron sumando otras y ahora somos 22 universidades las que llevan este modelo, adaptándolo cada una a su contexto. Únicamente las universidades de Colima y del Estado de Hidalgo somos las que llevamos este modelo en alianza permanente con PrevenIMSS y el Instituto Mexicano del Seguro Social”, añadió.
Dijo que este programa ayuda a las instituciones de educación superior para influir positivamente en los jóvenes y para apoyar a la comunidad universitaria en los procesos de cambio, “promoviendo estilos de vida saludable, fortaleciendo su autoestima y asertividad”. De esta manera, agregó, la U de C hace una propuesta de Modelo Nacional de Universidad Saludable PrevenIMSS, que se basa en siete acciones básicas.
“Contar con diagnósticos de salud de alumnos y trabajadores, afiliación de alumnos al IMSS, capacitación permanente de programas, la firma de convenios con instituciones como el IMSS, los Centros de Integración Juvenil, la SSA…; programas derivados de los diagnósticos de salud, seguimiento de las acciones en electrónico y un presupuesto para realizar las acciones”.
El líder de los universitarios destacó que para conocer el estado de salud de los universitarios se utilizan básicamente dos instrumentos, el primero es el Examen Médico Automatizado (EMA), que surge en la UNAM y consiste en una herramienta de diagnóstico que se aplica anualmente desde el 2004 a los alumnos de nuevo ingreso de la Universidad de Colima en sus niveles medio superior, superior y de posgrado.
Sobre las cifras arrojadas por el EMA en los estudiantes de nuevo ingreso el año pasado, Aguayo López indicó que del total de 8 mil 682 estudiantes inscritos a este periodo, 7 mil 884, es decir el 90.8% tuvieron cobertura de este servicio. De este porcentaje, en el nivel medio superior, 38.1% mostraron un estado de alta vulnerabilidad, mientras que en el nivel superior 50.1% estaban en esta misma situación, por lo que se tomaron medidas como la atención médica integrada y la promoción de estrategias de educación y autocuidado de la salud.
El segundo instrumento, que permite conocer las condiciones de salud al interior de la institución, dijo, es el examen VICORSAT (Vigilancia y Control de Riesgos a la Salud y Accidentes de Trabajo), una herramienta de diagnóstico que fue aplicada a 2 mil 500 trabajadores de las cinco delegaciones universitarias este 2010, para ver sus condiciones de salud y canalizar los casos que así lo requieran.
A lo anterior agregó que la afiliación de alumnos al IMSS se realiza de manera automatizada a través del Sistema de Control Escolar (SICEUC), que permite una cobertura del 100% de la matrícula a través del software de incorporación al IMSS en forma electrónica. Destacó, además, que a la credencial de los universitarios se le incorporó el número de seguridad social para casos de emergencia.
Al hablar de otras medidas preventivas, el rector señaló que se realiza una capacitación permanente en los programas de salud universitarios y se han firmado convenios con instituciones como la Secretaría de Salud, el IMSS, ISSSTE y los Centros de Integración Juvenil; se lleva a cabo el Programa de Activación Física en los Trabajadores, PROACTIF, y se implementa además el Programa Universitario para la Discapacidad PROUDIS, mediante el cual se aplica una Encuesta Electrónica para Discapacitados, única en nuestro país.
Mencionó también otros logros importantes, como la implementación de la Cartilla Electrónica de salud Universitaria desde el 2006 y la entrega, en septiembre de 2008, de la constancia de afiliación de la U de Colima a la Red Nacional de Universidades para la Prevención de las Adicciones (REUNA), de manos de su entonces presidente, Héctor Fernández Varela.
Dijo que se ha implementado exitosamente un seguimiento en forma electrónica de acciones preventivas contra epidemias como la influenza y la conjuntivitis, así como la participación en tres jornadas de descacharrización en apoyo al Gobierno del Estado de Colima, para combatir el virus del dengue, algo que arrojó resultados positivos, pues dijo que tan sólo el año pasado se presentaron 5 mil casos de dengue y para el 2010, luego de estas jornadas, hasta el pasado mes de octubre sólo había 886. “Colima, en el 2009, fue el segundo lugar nacional en incidencia y ahora estamos colocados en el lugar 13, y municipios como Manzanillo, Armería y Tecomán, que eran los más altos del país, ahora ya desaparecieron del mapa del dengue”.
Por último, habló de la infraestructura que ha permitido llevar a cabo muchas de las acciones antes mencionadas, que son los ocho módulos PREVENIMSS repartidos en todos los campus, donde se tiene el apoyo de 10 médicos, 10 enfermeras y pasantes de psicología que atienden a la comunidad en horarios matutino y vespertino.
El rector Miguel Ángel Aguayo finalizó su intervención diciendo que “este modelo sin duda alguna beneficia a todos, a las universidades a cumplir su función, beneficia a la Secretaría de Salud y a los hospitales del sector salud, pero sobre todo beneficia a la población a través de la cultura de estilos de vida saludables”.
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